Proceso de Obtención del Azúcar de Caña
Molienda
La caña es sometida a un proceso de preparación que consiste en romper o desfibrar las celdas de los tallos. Luego, unas cintas transportadoras la conducen a los molinos, donde se realiza el proceso de extracción de la sacarosa.
Clarificación
El jugo proveniente de los molinos pasa a un tanque donde se rebaja su grado de acidez. Allí se almacena. El jugo alcalinizado se bombea a los calentadores, donde se eleva su temperatura hasta un nivel cercano al punto de ebullición. Luego, antes de pasar a los clarificadores, el jugo va a un tanque de flasheo abierto a la atmósfera, en el cual pierde entre 3 y 4 grados centígrados por acción de evaporación natural; también se cambia la velocidad del jugo de turbulento a laminar. En los clarificadores se sedimentan y decantan los sólidos. Los sólidos decantados pasan a los filtros rotatorios, que trabajan con vacío y están recubiertos con finas mallas metálicas que dejan pasar el jugo, pero retienen la cachaza, la cual puede ser usada como abono en las plantaciones.
Evaporación
Luego, el jugo clarificado pasa a los evaporadores, que funcionan al vacío para facilitar la ebullición a menor temperatura. En este paso se le extrae el 75% del contenido de agua al jugo para obtener el producto o meladura.
Cristalización
El cocimiento de la sacarosa que contiene el jarabe se lleva a cabo en tachos al vacío. Estos cocimientos producirán azúcar crudo (para producción animal), azúcar blanco (para consumo directo) o azúcar para refinación. La cristalización del azúcar es un proceso demorado que industrialmente se acelera introduciendo al tacho unos granos de polvillo de azúcar finamente molido.
Separación o Centrifugación
Los cristales de azúcar se separan de la miel restante en las centrífugas. Estas son cilindros de malla muy fina que giran a gran velocidad. El líquido sale por la malla y los cristales quedan en el cilindro; luego se lavan con agua. Las mieles vuelven a los tachos o bien se utilizan como materia prima para la producción de alcohol etílico en la destilería. El azúcar de primera calidad retenido en las mallas de las centrífugas se disuelve con agua caliente y se envía a la refinería para continuar el proceso. Cabe resaltar que en este punto se obtiene lo que se llama azúcar rubio, debido al color de los cristales. A continuación, se detalla el proceso mediante el cual el azúcar rubio se convierte en azúcar blanco o azúcar muy fino.
Refinado
Mediante la refinación, se eliminan los colorantes o materias inorgánicas que el licor pueda contener. El azúcar disuelto se trata con ácido y sacarato de calcio para formar un compuesto que arrastra las impurezas, las cuales se retiran fácilmente en el clasificador. El licor resultante se concentra, se cristaliza de nuevo en un tacho y se pasa a las centrífugas para eliminar el jarabe.
Secado
El azúcar refinado se lava con condensadores de vapor, se seca con aire caliente, se clasifica según el tamaño del cristal y se almacena en silos para su posterior envasado.
Proceso de Elaboración de Comprimidos Recubiertos
Componentes Iniciales
Se utilizan contenedores, denominados comúnmente jaulas, que albergan todos los componentes necesarios para la fabricación de un lote de comprimidos. Estos contienen un polvo blanco compuesto por dos tipos de sustancias:
- El principio activo: responsable de la acción farmacológica.
- Los excipientes: sustancias que facilitan la elaboración, adecuada administración y asimilación del medicamento en el organismo.
Mezclado y Granulación
Para mezclar los componentes, se emplea una tolva que los transfiere mediante un sistema de vacío a una granuladora.
El proceso de mezclado se realiza en dos etapas:
- Mezcla en seco: Para unificar los componentes.
- Humectación: Se inyecta todo el líquido aglutinante dentro de la mezcladora.
Gracias a la humectación, el polvo se transforma en gránulos, adquiriendo una consistencia densa, proceso conocido como granulación húmeda.
Secado del Granulado
Dado que para la formación de comprimidos se necesita una mezcla seca, el granulado húmedo se traslada a un secadero de lecho fluido. En este equipo, unas turbinas inyectan aire caliente y seco que evapora el líquido contenido en el granulado.
Tamizado y Homogeneización
Una vez seco, el granulado debe tener un tamaño uniforme para asegurar que la dosis de cada comprimido sea la misma. Para lograrlo, se utiliza un molino cónico, conectado al secadero de lecho fluido mediante un sistema de vacío.
Dentro del molino, los gránulos pasan por un tamiz con orificios de un tamaño específico, lo que garantiza la homogeneidad del tamaño de partícula.
Compresión
Con el granulado ya uniforme, se procede a la compresión. El granulado es dosificado en una matriz donde unos punzones ejercen una fuerte presión, formando así pequeñas piezas denominadas comprimidos.
Posteriormente, los comprimidos caen sobre un plato vibratorio que ayuda a eliminar cualquier polvo residual.
Recubrimiento
Preparación de la Suspensión de Recubrimiento
Para el recubrimiento, primero se prepara una suspensión. En tanques adecuados, se dispone el líquido base y se le agregan polvos que proporcionan color y consistencia a la suspensión líquida con la que se recubrirán los comprimidos.
Aplicación del Recubrimiento
Esta suspensión se bombea a una paila de recubrimiento. Dentro de la paila, los comprimidos giran continuamente mientras unas pistolas pulverizan la suspensión en forma de spray sobre ellos, formando así la película de recubrimiento.
Durante este proceso, se inyecta aire caliente y seco para eliminar la humedad y evitar que los comprimidos se adhieran entre sí.
Control de Calidad
Se realizan exhaustivos controles de calidad, que incluyen:
- Controles microbiológicos: Para asegurar la ausencia de contaminación.
- Controles fisicoquímicos: Para verificar que los comprimidos cumplen con todas las especificaciones de calidad y fabricación.
Envasado
Para proteger los comprimidos, se envasan en blísteres. El proceso de envasado es el siguiente:
- Una máquina toma las láminas de material plástico y forma cavidades o burbujas del tamaño justo para los comprimidos.
- Los comprimidos se depositan en estas cavidades.
- Luego, las láminas pasan por un rodillo con temperatura que adhiere y sella la tapa de aluminio.
- Finalmente, el blíster se corta según el tamaño requerido y se envasan en cajas para su distribución en el mercado.
